Hoy en día estamos más inmersos en la tecnología y en el ámbito del estudio también lo podemos comprobar.
Antes hacíamos trabajos escritos a mano, con recortes de fotografías de revistas o gráficos diseñados manualmente.
Todo eso ya ha quedado atrás y no hay alumno o profesor que no utilice un ordenador para escribir sus trabajos, crear gráficas, diseñar o incluso tomar apuntes.
Y es que cada vez más, todas estas herramientas están ayudando a muchos jóvenes o docentes a mejorar y perfeccionar su aprendizaje y enseñanza.
Además, en casi todos los centros se pueden encontrar los últimos modelos de ordenadores para que sus alumnos puedan realizar trabajos o estudiar en su centro con ayuda de todo lo que un programa o internet ofrecen.
Las bibliotecas siguen estando repletas de alumnos y libros pero ahora también ofrecen la posibilidad de conectarse a la red para buscar información complementaria a la materia que se esté estudiando.
También los métodos de enseñanza han evolucionado y mejorado, con lo que los profesores tienen la tarea de transmitir sus conocimientos de manera más fácil y visual.
Los alumnos notan el cambio y lo agradecen debido a que consiguen tener los apuntes de manera digital por lo que estarán más limpios y será más fácil a la hora de estudiar.
En un futuro todo es posible porque ¿quién nos iba a decir que leeríamos los libros en un aparato llamado “ebook” y que, en vez de pasar las hojas daríamos a una tecla?
